Infidelidad Sutil, Por Ahí No Es!
Las relaciones no monógamas. Un mundo donde el amor es como un buffet: puedes probar un poco de todo sin sentirte culpable. Pero, como en cualquier buffet, a veces uno se pasa de la raya y termina en la sección de “infidelidades sutiles”
1. La Tentación del Mensaje “Inocente”
Imagina esto: estás en una relación poliamorosa y decides enviar un mensaje “inocente” a esa persona que te hace sonreír. “Solo un saludo”, piensas. Pero, claro, ese saludo se convierte en un intercambio de memes coquetos y, de repente, estás compartiendo tus secretos más profundos. ¡Ups! La línea entre la amistad y la infidelidad se ha desdibujado más que tu delineador después de una noche de fiesta.
Consejo: Si el mensaje empieza a sonar más como un guion de telenovela que una conversación normal, es hora de poner el freno. “Hola, ¿cómo estás?” puede convertirse en “¿Te imaginas si fuéramos un par de tortugas en una playa nudista?” en un abrir y cerrar de ojos.
2. Las “Citas de Amistad”
Ah, las famosas “citas de amistad”. Esas salidas que comienzan con un “solo somos amigos” pero terminan con miradas que podrían derretir el hielo en el Ártico. Te encuentras en un café, y antes de que te des cuenta, estás hablando de tus sueños más íntimos y compartiendo postres. ¡La próxima vez que digas que solo eres amigo, asegúrate de que no haya una tarta de tres pisos en la mesa!
Consejo: Si la conversación se vuelve más intensa que una película de acción, es posible que necesites revisar tu brújula moral. ¡Recuerda que los amigos no suelen tener citas a la luz de las velas!
La “Amistad” en Redes Sociales
Las redes sociales son el terreno de caza perfecto para las infidelidades sutiles. Un “me gusta” aquí, un comentario coqueto allá, y de repente, estás en medio de un juego de “¿quién puede ser más ingenioso?”. Te encuentras en un mar de emojis y mensajes directos, y antes de que te des cuenta, has creado un pequeño mundo paralelo.
Consejo: Si tus mensajes directos empiezan a parecerse a un guion de comedia romántica, tal vez deberías considerar un “desintoxicación digital”. ¡Deja de lado esos emojis y regresa a la realidad
4. Las “Reuniones de Trabajo”
Las reuniones de trabajo son otra trampa clásica. “Solo vamos a discutir algunos proyectos”, dices con una sonrisa, mientras tu mente está en otro lugar. Esas horas extras en la oficina pueden convertirse en algo más que solo trabajo. Antes de que te des cuenta, estás compartiendo una botella de vino y hablando sobre lo que realmente significa “sinergia”.
Consejo: Si la reunión de trabajo se convierte en una cena romántica, es hora de revisar las políticas de la empresa. ¡Recuerda que el trabajo es trabajo y el amor es amor!
5. La “Conexión Emocional”
La más sutil de todas: la conexión emocional. Es esa chispa que sientes al hablar con alguien que no es tu pareja principal. “Pero es solo una conexión emocional”, te dices a ti mismo. Sin embargo, esa conexión puede ser más peligrosa que un gato en una caja de sorpresas. Antes de que te des cuenta, estás compartiendo tus pensamientos más profundos y tus sueños más locos, y tu pareja principal comienza a preguntarse si deberías tener un “grupo de apoyo emocional”.
Consejo: Si te encuentras compartiendo más de lo que harías con tu pareja, es hora de poner un poco de distancia. ¡Recuerda que las conexiones emocionales son como los pantalones de yoga: cómodas, pero no siempre apropiadas para salir!
La Percepción de la Sociedad: “¡Todo Vale!”
Ahora, hablemos de la percepción de la sociedad. Muchos piensan que en las relaciones no monógamas no hay infidelidad porque todos tienen luz verde para hacer lo que quieran. ¡Oh, cómo se equivocan! En realidad, todos estamos respetando acuerdos mutuos. En mi caso, por ejemplo, prefiero saber y hasta conocer a las parejas de mis parejas. Pero algunas de mis parejas prefieren no saber o conocer del otro. Es como jugar a “¿Quién quiere ser millonario?” pero sin el comodín.
Consejo: La clave está en coordinar. Es fácil cuando todos están en la misma página, pero cuando no lo están, es como intentar hacer un rompecabezas con piezas de diferentes juegos. ¡Ahí es donde hay que renegociar en lugar de hacer lo que te da la gana!
Reflexión Final
Las relaciones no monógamas pueden ser un viaje emocionante, pero las infidelidades sutiles pueden surgir en cualquier momento. La clave es la comunicación honesta y la claridad sobre los límites. Así que, la próxima vez que sientas la tentación de desviarte, recuerda: ¡la sinceridad es el mejor camino hacia una relación feliz y saludable!
Después de todo, el amor es como un buffet: ¡disfrútalo, pero no te llenes de cosas que no deberías!