Límites: Las Reglas Invisibles Que Nadie Recuerda Hasta Que Alguien Las Cruza
El poliamor y el mundo swinger tienen muchas cosas en común: comunicación, acuerdos y un Google Calendar bien organizado. Pero si hay algo que pone a prueba hasta la relación más abierta, son los límites.
Y no porque no existan… sino porque nadie los recuerda hasta que alguien mete la pata.
Las Reglas Que “Todos Teníamos Claras” (Hasta Que No)
En toda relación abierta hay una lista de reglas, habladas o no. Pero, curiosamente, estas reglas tienen la asombrosa capacidad de volverse invisibles hasta que alguien las pisa.
— "Obvio que podías besar a otras personas... pero no EN LA COCINA. La cocina es sagrada."
— "Sí, dijimos que se valía con amigos… pero NO con amigos que juegan dominó con mi papá."
— "No es celos, es cuestión de respeto… ¿desde cuándo 'me gustan las pelirrojas' significa que te puedes acostar con Jessica?"
Lo mejor de estas reglas es que muchas veces solo existen en la mente de quien las impone, y la otra persona solo se entera cuando ya está en juicio:
"¡¿Cómo que NO SABÍAS que los miércoles son solo para nosotros?!"
El Manual No Es Universal
Si has estado en el mundo poliamoroso por más de cinco minutos, te habrás dado cuenta de que los límites son como los menús de los restaurantes veganos: cada quien tiene uno diferente, y algunos no tienen sentido.
Ejemplo real:
✅ Puedes dormir con alguien más.
❌ Pero no ver dos episodios seguidos de la serie que vemos juntos.
✅ Puedes tener citas románticas con otras personas.
❌ Pero si le preparas café en la mañana, estamos en problemas.
¿Por qué? Porque hay cosas que duelen más que el sexo: como saber que le hiciste pancakes a alguien más y a mí me das cereal con agua.
El Momento de la Revelación
Los límites suelen revelarse en momentos críticos, como:
Cuando alguien los cruza (sin saber que existían).
Cuando alguien ve que se los cruzaron a otro y dice: "Esa regla también aplica para mí, ¿verdad?"
Cuando hay alcohol de por medio y alguien empieza con: "No es por celos, pero…"
Y es ahí cuando se actualiza el contrato de relación, con nuevas cláusulas agregadas de la noche a la mañana.
Los Clásicos de Siempre
Si no estás seguro de cuáles son tus límites, aquí te dejo una lista de los más comunes y sus niveles de flexibilidad:
Sexo con otros ✅ Ok, si hay comunicación
Citas románticas 🤔 Depende del humor del día
Dormir con alguien más ⚠️ Solo si no me entero
Ver series juntos 🚨 ¡Esto sí es imperdonable!
Meter a alguien a “nuestra” cama ❌ En este hogar, se adulteran los cuerpos, pero no las sábanas
Conclusión: Hablen Claro Antes de Que el Caos Ocurra
En el poliamor y el mundo swinger, los límites son como las señales de tránsito en Latinoamérica: pueden estar ahí, pero eso no significa que todo el mundo las vea.
Así que, en lugar de esperar al desastre, mejor háganse estas preguntas:
👉 ¿Qué me haría sentir incómodo?
👉 ¿Qué es negociable y qué es un NO absoluto?
👉 ¿Cómo reaccionaría si mi pareja hiciera X, Y o Z?
Y sobre todo, acuerden las reglas ANTES de que alguien las cruce, porque no hay nada más incómodo que una discusión en plena fiesta swinger porque alguien se atrevió a usar la almohada "especial".
Recuerda: un límite que no se ha hablado es un conflicto esperando a ocurrir. 😜